Aquí,con éste homenaje a París ha conseguido callar muchas bocas y convertirse en el mayor éxito de toda su filmografía.
A estas horas,ya todo el público de Midnight la ha visto,por lo que no vamos a andarnos con rodeos respecto a su argumento.[ATENCIÓN SPOILER] Gil es un guionista reconvertido a escritor,que en un viaje familiar con la familia de su histérica novia,descubre que todas las medianoches puede transportarse en el tiempo a los fabulosos años 20,donde conocerá a personajes como Dalí,Hemingway,Picasso y mucho personaje bohemio,entre ellos Adriana,que le hará recordar qué es el amor.[FIN SPOILER]
Con un argumento con el que todo crítico que no le tenga demasiada simpatía podría estar esperándole con las uñas puestas,consigue convertir algo extraño en cotidiano,que parezca normal,y que lo que sientas como extraño sea el actual París,el del siglo XXI,donde el protagonista no siente estar viviendo realmente su vida.
Muchos puntos en común y diferencias con otro viaje turístico del director,Vicky Cristina Barcelona,pero en ésta ocasión corrige los defectos de aquella y potencia los aciertos(hemos de confesar que nos pareció VCB mejor de lo que la pusieron).
Allen se da cuenta que el espectador no quiere viajar a la ciudad,o eso cree el espectador,por lo que no se desespera en rodar una postal en cada rincón de París,como le ocurría con Barcelona,y deja atrás la estampa fácil con visión tópica sobre un país extranjero,para adentrarnos en una historia donde de fondo París forma parte,pero sin que se note.
Potencia como hemos señalado los aciertos,entre ellos la mirada nostálgica,lo triste,porque a pesar de ser una comedia y de tener puntos de ese humor muy Allen,se acerca más a la nostalgia,por ese pasado que fue mejor para cada uno.Porque a pesar de hablar del pasado ideal de cada uno,nos quiere decir que siempre añoramos los tiempos pasados en los que creemos que éramos felices,y dejando de serlo en el presente,aunque esa lección la aprende nuestro protagonista al final de la historia.
Un Allen rejuvenecido y fresco,con uno de los guiones más inteligentes que se ha visto en el cine del último año,donde la simplicidad reina y hace que sea perfecta,con unos personajes muy bien construidos,ya sabemos lo buen director de actores que es el director y aquí consigue que Owen Wilson deje su bagaje de caras y ofrezca una gran interpretación,aunque la que consigue enamorar al espectador es una Marion Cotillard,muy pero que muy francesa:sexy,frágil y misteriosa.
Nominada a 4 premios Oscar,incluyendo película,director,guión original y dirección artística.Hará las delicias de todo amante del cine europeo,porque ha conseguido Allen hacer su primera obra europea a pesar de ser su sexta en nuestro continente. Una joya de 2011 y sin duda una de las mejores de toda su carrera.
+La mirada nostálgica que tan bien le sienta a París
-El entusiasmo por la película puede decepcionar a algún espectador
PUNTUACIÓN TOTAL: * * * *
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