Después de la muy notable Héctor,vuelve Gracia Querejeta con otro "drama de barrio".En esta ocasión deja los sin sabores y la búsqueda de la indentidad,propia de la adolescencia y sitúa a una mujer con hijo en búsqueda de sí misma tras darle la vida una bofetada.
La historia comienza con la muerte del progenitor de la protagonista,que sumando el abandono del marido,hará que vuelva al hogar y comience una nueva vida abriendo el antiguo negocio de billares del padre junto con la amante de éste,haciendo que el antiguo equipo de billar vuelva a sus mejores tiempos.
En toda esta situación de personajes,cada uno con su drama personal,al que la directora otorga a cada uno su momento de gloria.Aunque,lo que caracteriza la película no es una visión pesimista,sino la alegría y el optimismo ante una situación inesperada,que por complicada que se ponga la vida siempre se puede encontrar una salida.
Bajo un guión inteligente,construye una historia con sus pequeños momentos de comedia,porque éstos personajes saben reírse de sí mismos,la directora sabe que para llegar al espectador no debe castigarlo con 2 horas de drama puro y duro,sino que le prima la sensación cuando acaba la película,una gran sonrisa.
Película de actores,genialmente dirigidos,duelo interpretativo entre Maribel Verdú y Blanca Portillo,donde la primera nos ofrece una de las mejores interpretaciones de su carrera,madura y fuere;Blanca Portillo como siempre está espléndida.El resto del reparto también sobresale,sobe todo Raúl Arévalo,que se está labrando una carrera muy interesante.
Nominada a 10 premios Goya y ganadora de 2 a mejor actriz principal para Maribel Verdú y actriz de reparto para Amparo Baró,una película muy interesante y recomendable,de esas que le devuelven las ganas de seguir adelante incluso hasta el más pesimista.
+El optimismo que impregna la película
-No se dan explicaciones de por qué huye el personaje de Enrique Villén
PUNTUACIÓN TOTAL: * * * *
viernes, 16 de marzo de 2012
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