Peter Jackson vuelve al mundo Tolkien que tantas alegrías le ha brindado en su carrera, esta vez adapta un libro más corto y con argumentalmente enfocado más a un público infantil.
La historia nos sitúa al joven Bilbo Bolson (Martin Freeman), años antes de los hechos ocurridos en "El Señor de los Anillos", donde emprende una aventura junto con el mago Gandalf (Ian McKellen) y 13 enanos para recuperar la tierra de éstos.
Después de acabar con la famosa triología, el director realizó dos películas bien diferentes como "King Kong" y "The Lovely Bones", pero que tenían en común esa pasión por crear grandes y poderosas imágenes, algo que indudablemente tenía que desembocar en el universo mitológico del escritor británico. Parecía una cuestión moral que fuera Jackson quien debiera hacerse cargo de la propuesta, y el más indicado para sacar partido un libro muy extenso y convertirlo en tres películas.
Vemos a un Jackson en plena forma, que se ha esmerado y se ha esforzado al máximo, dando lo mejor de sí para ofrecer una película emocionante y visualmente sorprendente, con momentos que no tienen nada que envidiar a sus predecesoras, a pesar de ser una historia con menos acción.
Pero, a pesar del buen hacer del Jackson director, su faceta como guionista es la que hace que nunca llegue a la grandiosidad de "El Señor de los Anillos".
En las otras películas, partía con material suficiente para dilucidar qué era necesario y qué no, pero en este caso ha querido alargar la historia, escrita con cuatro guionistas más entre los que se incluyen su esposa Fran Walsh y Guillermo del Toro.
Esa constante sensación de que todo está alargado hasta no poder más, hace que el conjunto sea irregular y diferente entre todas sus partes. Con un primer tercio de metraje muy por debajo de las espectativas de lo que puede ofrecer Jackson, donde parece que asistimos a un skecht del popular programa "Hommo Zapping" donde enanos y comedia se dan la mano, que llega a tener algún que otro momento cinematográficamente irritable, a pesar a que hará las delicias a los más pequeños de la casa.
Y quizás la culpa no es del todo de Jackson, si la obra original es así, no tiene por qué traicionar ese espíritu, pero precisamente por cómo es, alargarlo no era la mejor opción.
A pesar de su arranque, cuando oficialmente comienza la aventura del protagonista es dónde vemos todo lo que tiene preparado su director, un festín de acción e imaginación, que hace sumar muchos puntos y que olvidemos el mal inicio de la película, consiguiendo que se lo perdonemos y podamos disfrutar de una película que aunque nunca llega al nivel de sus anteriores, consigue arrancar algún que otro momento sobrecogedor, apoyado sobre todo en una fotografía magnífica al servicio del 3D y la música de Howard Shore.
Una pelicula que poco a poco se deja disfrutar, que colmará las expectativas de los seguidores de "El Señor de los Anillos", aunque se le puede exigir más de lo que da, pero que parece asentar las bases de una siguiente película que se indaga superior a ésta.
+ Ver hasta dónde es capar de llegar la imaginación de Jackson
- El tedioso comienzo
PUNTUACIÓN TOTAL: * * *
lunes, 14 de enero de 2013
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