Llega a los cines españoles
"La Desaparición de Eleanor Rigby" tras su paso por el Festival de
Cannes y de San Sebastián. Un drama romántico producido y protagonizado por la
siempre magistral Jessica Chastain.
Hay que
partir de la base de que el montaje final que los espectadores verán en el cine
no es la idea original que estaba dentro de la cabeza de Ned Benson. Lo que se
pudo ver en Cannes fueron dos películas que contaban la misma historia pero
vista desde dos perspectivas diferentes, la de cada uno de los dos
protagonistas de la película, lo que componía el díptico "Him" y
"Her" y que tras pasar por las manos de los hermanos Wenstein se ha
convertido en este montaje llamado "Them".
Dicho
todo esto, hay que analizar la película en sí que se puede ver en cines y de
tal forma distanciarse de la interesante visión que pudiera tener cada una de
las dos versiones, algo que durante el montaje final quedan retales imposibles
de despegar del espíritu de la película.
Ned
Benson ha compuesto un drama romántico que a pesar del sugerente título nada de
suspense e intriga encontramos en la película, sino que hace referencia a un
estado en el que el protagonista masculino se encuentra tras la huida del hogar del personaje interpretado por Jessica Chastain.
Una película rodada con imaginación que muestra a un director capaz de ofrecer una historia romántica sin necesidad de caer en los tópicos del género y que además se encuentra en constante movimiento para no caer en lo convencional.
Una película rodada con imaginación que muestra a un director capaz de ofrecer una historia romántica sin necesidad de caer en los tópicos del género y que además se encuentra en constante movimiento para no caer en lo convencional.
Al fin
y al cabo estamos ante una historia que gira en torno a la incomprensión, la
espera y la rabia; algo que Benson es capaz de transmitir de manera magistral a
través de la mirada de sus protagonistas, que con sus actos no dejan demasiadas
pistas al espectador, al que hace recorrer un camino para completar el puzzle
que compone esta historia de amor.
Mediante
el uso de unos no abusivos y bien dosificados flashbacks y una mirada puesta en
el futuro, apoyada por los personajes secundarios, se va componiendo esta
trágica pero hermosa historia de amor y desamor en la que sus protagonistas van
desprendiéndose del armazón con el que se han protegido para sobrevivir a un
drama del que nada se nos muestra y que se va descubriendo poco a poco a medida
que avanza la historia.
Es de alabar
que el director no haya querido caer en el sentimentalismo y el drama fácil
ante la situación que desencadena la verdadera motivación de la desaparición de
este Eleanor Rigby. Donde otros hubieran podido rascar la lágrima fácil, Benson
es capaz de encontrar otro camino como el de las consecuencias que se pueden
producir en una pareja tras un hecho dramático. Algo que a pesar del remontaje
final puede ser gracias a un guión bien escrito y delicado, que respeta a sus
personajes y en ningún momento busca juzgar ni encontrar culpables, de tal
forma que el espectador no pueda comprender en algunas escenas por qué los
protagonistas actúan de dicha manera, no corre el riesgo de que no sentir empatía hacia ellos.
Y bajo
la piel de los protagonistas encontramos a dos actores en estado de gracia,
tanto un James McAvoy que ha compuesto uno de los mejores trabajos de su
carrera como una Jessica Chastain que se come la pantalla y que es capaz de
transformarse en una incomprendida Eleanor a través de sus silencios y la
fragilidad de una mirada que es casi capaz de atravesar la pantalla.
Sin
embargo, puede que todos los logros de la película puedan verse en algún
momento empañados por culpa de un montaje que en ocasiones demuestra no ser el
verdadero, enfocando la mirada de cada protagonista no precisamente en el
momento que le corresponde y tratando a algún personaje secundario de forma
poco agraciada, como el interpretado por Isabelle Hupert, al que se le
encuentran demasiados cortes de tijera.
"La
Desaparición de Eleanor Rigby" es una película delicada, que se toma su
tiempo para mostrar lo que quiere contar su director, que se vale de una bonita
dirección de fotografía y de una sugerente y emotiva banda sonora para mostrar una historia de amor en la que sus protagonistas no son capaces de demostrar de una forma correcta sus sentimientos en la que muestran cómo pueden vivir el uno sin el otro, pero no sin amarse.
+ No
caer en sentimentalismos y dramas de lágrima fácil.
- Su
excesiva duración y un final triple y excesivamente alargado.
PUNTUACIÓN
TOTAL: * * * *
0 comentarios :
Publicar un comentario